Buenos Aires, 2008
Carlos no entendía por qué me desesperaba buscando picos (sí, picos de pan, de toda la vida) por todos los hipermercados, chinos, supermercados y demás sin éxito. Como mucho encontraba grisines con mantequilla que apenas saciaban mi antojo después de año y pico fuera de España. Es increíble y, nunca lo hubiera pensado, pero los picos es de las cosas que más extrañaba de aquí. Ni el jamón ni el marisco, fíjate qué baratita salgo.
Él, sin embargo, no concebía una comida sin arroz (arroz blanco) y creyó que así seguiría comiendo toda la vida. Peeeeeero, la vida da muchas vueltas, llevamos aquí 9 años y el arroz blanco no es habitual en casa. Lo curioso es que Carlos, que en su vida había comido trigo – acuérdate que es colombiano y allí el trigo como que no se estila mucho – no puede pasar sin comer pan y ahora entiende perfectamente mi trauma por comer sin picos.
En su escuela estudió panadería obviamente, pero de aquella manera…Con teorías y técnicas que nada que ver. La necesidad dentro de una cocina – ya como empleado – donde le exigían realizar todo desde cero (masas de empanadas, cocas, pizzas, focaccias, regañás, panes, bollería salada, etc) hicieron que comenzara a interesarse de una forma más profesional y él, que es un obsesivo de lo que no sabe o no conoce, comenzó a formarse por su cuenta, a leer, a probar, a investigar hasta saber la barbaridad de cosas que sabe hoy y toda las teorías que ha desarrollado a través de su experiencia tanto trabajando en restaurantes como realizando pruebas en la escuela.
Y se hizo adicto.
Y lo entiendo y es algo que- entre bromas – avisamos a todos los alumnos. El pan engancha. Y es que aún siguen flipando con los resultados que se obtienen tan sólo utilizando ingredientes tan tan básicos como la harina, el agua, la levadura (y a veces ni eso) y tus manos. Decenas de panes diferentes, panes panes, con sabor a pan, con textura de pan. Nada de masas chiclosas, nada de sabores artificiales. Panes como esos que recuerdas de tu viaje a Galicia de pequeño o a esos que vendían antiguamente en el obrador de tu barrio.
Y ya, cuando descubren los prefermentos o la masa madre, la entienden, la cuidan tal cual tamagochi, la bautizan, la alimentan y recogen sus frutos en forma de panes con matices que ponen los pelos de punta…¡qué gustazo!
Así que, aprovechando que estamos a dos semanas de iniciar el Curso Profesional de Panadería, el post de hoy es en formato vídeo y sobre la masa madre y otros prefermentos. Algo que lleva a mucha confusión, que seguís preguntándonos vía email o en comentarios y que creemos importante dejarlo claro ya de una vez y que puedas hacer panes con más seguridad. Haz clic sobre la foto de abajo y accede al vídeo donde Carlos te cuenta todo ↓ ↓ ↓
> Para completar la información que Carlos te ha dado en el vídeo, te traigo una sorpresita descargable y gratuita que va a complementar toda esta información: un recopilatorio con las recetas de la masa madre, poolish y biga paso a paso para que comiences a preparar en casa panes de calidad.
Espero que te guste y lo disfrutes.
Y, como siempre, si tienes alguna duda, te esperamos en los comentarios del blog.
Un abrazo,
Vero.
¡Este vídeo me lo tengo que mirar yo con detenimiento!
Gracias chicos :)!
🙂
Gracias Venu y si tienes cualquier duda, aquí estamos 🙂
Un abrazo.